Cuatrocientas cuarenta empresas, según la Asociación de Empresarios de Mos, han manifestado su deseo de contar con una parcela en el polígono industrial de A Veigadaña, que, después de tres años de tramitación y seis de negociaciones, está a punto de convertirse en realidad. La Consellería de Vivenda e Solo contestará a las alegaciones presentadas al proyecto de polígono de 800.000 metros cuadrados antes del día 19 de octubre.

A partir de ese momento, el proyecto pasará a la Dirección General de Urbanismo que tiene tres meses para resolver, lo que quiere decir que antes de fin de año podría haber luz verde. «Las expropiaciones se hallan en su fase final», señalaron fuentes de la consellería de Vivenda. Las obras de construcción del polígono comenzarán en el primer trimestre del año 2008. El plazo de ejecución es de 16 meses pero «podrían quedar reducidos a doce», aseguran fuentes oficiales de la consellería.

La Xunta ya sacó a concurso las obras de urbanización y se presentaron 28 ofertas. La inversión prevista es de 27,5 millones de euros. En el año 2004 la Xunta ya estimaba una inversión de veinte millones de euros para urbanizar la zona que dará acogida a numerosas empresas que se hallan en situación irregular, o que no tienen espacio para crecer o servicios adecuados.

De los 800.000 metros que va a tener el parque de A Veigadaña, situado muy cerca del aeropuerto de Peinador y de las autovías y autopista de acceso a Vigo, aproximadamente la mitad es el suelo ocupado realmente por las industrias. El resto está destinado a viales, zonas verdes y servicios.

El nuevo polígono proporcionará empleo a dos mil trabajadores, según las estimaciones del Ayuntamiento de Mos. La mayor parte de las empresas que se van a establecer allí no son nuevas sino traslados de otras que amplían sus instalaciones.

La intención de la Xunta es que el polígono esté a disposición de las empresas en 2008, pero para que eso ocurra los trámites y la construcción no se deben retrasar.

Arrufana

Como A Veigadaña resulta insuficiente para cubrir la demanda de las empresas de Mos, donde existen más de un millar d compañías de mediano y pequeño tamaño, ya está prevista la ampliación del polígono industrial en el barrio de Arrufana. En esta zona ya hay algunas empresas que se hallan establecidas de modo disperso. Este polígono estará ubicado al este de la N-550, en los límites del Concello de Mos con el de Redondela y tendrá un área de suelo industrial de 1,2 millones de metros cuadrados. En estos momentos se está redactando el proyecto sectorial para su ejecución, que correrá a cargo de Xestur, la empresa pública perteneciente al Instituto Galego da Vivenda e Solo, dependiente de la consellería de Vivenda e Solo.
Tres cuartas partes del polígono estarán ubicadas en terrenos del ayuntamiento de Mos y una cuarta parte en el de Redondela, municipio que carece de un polígono industrial urbanizado.

Para Arrufana, las cosas están más verdes. El Concello acaba de constituir una comisión municipal en la que estarán representados todos los partidos políticos y la Asociación de Empresarios de Mos. Esta comisión adjudicará las parcelas con «criterios de transparencia».

Desde el Ayuntamiento de Mos se insiste mucho en que estos nuevos polígonos no pueden ser objeto de especulación. A los gobernantes locales no le parece de recibo que los terrenos se adjudiquen a una empresa y ésta los subarriende a otra.
En cualquier caso en la zona de Arrufana tiene que realizarse el proyecto de urbanización con los informes previos de todos los organismos implicados, desde la Consellería de Medio Ambiente a la delegación de Patrimonio. Luego se expondrá a exposición pública se presentarán las alegaciones y finalmente se llevará a cabo el proyecto de expropiación.

«Nuestros socios facturan 480.000 euros anuales y necesitan más terrenos aptos»

Francisco Domínguez es el gerente de la Asociación de Empresarios de Mos (Aemos), una entidad que ocupa una zona del Centro de Desarrollo Local en la carretera que une el aeropuerto con Tameiga.
-¿Cómo es la situación actual?
-En Mos no hay polígonos industriales sino zonas de concentración de empresas. Muchos empresarios se han ido ubicado en un territorio que adolece de servicios de infraestructuras.
-¿Cómo se han gestado estos polígonos?
-A partir del año 2001 nos reunimos con los conselleiros. Primero con Cuiña, luego con Núñez Feijoo y ahora con la conselleira. Nos ofrecimos a colaborar y ser los interlocutores con los empresarios porque nos manifestaban sus grandes necesidades de asentamientos industriales para poder competir.
-Pero no había el planeamiento municipal necesario.
-Muchas empresas estaban asentadas en suelo rústico y ante la ausencia de un plan general no había lugares apropiados para el establecimientos de más compañías. Se daba la circunstancia de que nosotros estábamos recibiendo peticiones de toda la comarca.
-Es de imaginar que no caben todos.
-Para nosotros es prioritario el empresariado local.
-Ante esta falta de planeamiento local, ¿la Xunta movió ficha?
-Se puso en marcha el polígono con una tramitación de orden supramunicipal.
-Como el hospital de Vigo.
-Sí, algo similar.
-¿Cuánto facturan las empresas de Mos?
-La facturación es de 80.000 millones de pesetas anuales. Es el quinto municipio de la provincia con mayor volumen de facturación empresarial. El primero es Vigo y en segundo lugar está Pontevedra. Después van O Porriño y Redondela.

lavozdegalicia.es/vigo/2007/10/14/0003_6225702.htm

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